Desperté de mis sueños blancos,
me quedé dormida sobre las lentas olas,
y la luz suave de la mañana
se coló hasta tu almohada..
Te soñé, tendido y abrazado, te soñé jugando con mi pelo,
Nos quedan amaneceres pendientes
fríos y abrigados,
sin reloj, sin prisa, ni tiempo.
© Mar Muñoz *Lluna* |